Express yourself, don't repress yourself
Hidroboy's Greatest Hits:
Creo que voy a dejar de poner lo de los volúmenes porque me pierdo y los pongo mal. Diré que este es el 20 y si cuela cuela:
¡He vuelto!
¡Oleeeee! ¡Que suenen las trompetas! ¡Que caiga el confetti! ¡Que se desnuden los chulazos! ¡Hidroboy is Back!
Sé que he estado mucho tiempo sin escribiros, pero es que estaba pasando por un momento muy... doloroso. Algunas de vosotras, queridas amigas, ya sabéis que tenía una piedra en el riñón y como no salía pues estaba medio día retorciéndome de dolor y drogándome para que no me doliera (qué cuentista soy...).
Total, que me he tirado una semana bebiendo más agua que una vaca y meando cada cuarto de hora y hoy, por fin, creo que puedo decir que ya no tengo piedra. Se ha debido deshacer por que yo no he sacado ninguna piedra.
Y bueno, dejo de hablar de cosas que salen por la punta del pene que muchos de vosotros debéis estar retorciéndoos de dolor y otros... os estáis pasando la lengua por los labios ¡Indecentes!
Os cuento una cosa. Hace mucho tiempo hice un post sobre los Heteros Morbosos. Mi inspiración fue un chico al que conocí de rebote (era el típico conocido de un conocido) por el que nunca me interesé hasta que vi una foto suya y vi que estaba buenísimo (llámame tonta!). Así que empecé una maniobra de acoso y derribo hasta que me di cuenta de que no servía de nada por que el pobre era más tosco que un ladrillo y además empezaba a ponerme nervioso con su absurdo juego ambiguo de "que sí, que sí... pero mejor no". De él saqué grandes frases como "Yo soy genéticamente hetero... aunque en determinadas circunstancias me podría líar con un tío" o "Dije Johnny Depp, y tú no eres Johnny Depp" (Al más puro estilo Álex de la Iglesia: ¡Dije Johnny Depp!).
El caso es que un día me invitó a una fiesta en su casa a la que, realmente, no me apetecía ir. Y no me apetecía por que me veía qué iba a ser: un montón de tíos heteros sentados en el sofá bebiendo cerveza sobándose el paquete y diciendo cosas que sólo saldrían en una serie de José Luis Moreno. Y si había alguna tía, sería tonta.
Fue entonces cuando un amigo común me preguntó si iba a ir y le dije que si iba él sí que iría. Al rato me vino el Hetero Morboso a decirme que si iba a ir; yo me hice de rogar un poco (con lo que me gusta a mí) hasta que me di cuenta de que lo que quería era que yo fuera para que el amigo común este también fuera... él lo negó, pero el caso es que el amigo común ya me lo había dicho antes.
Total que como me aburría dejé de perder el tiempo con él y me fui a perderlo con otra cosa.
Hasta ayer.
Otro amigo común (que dice es hetero pero se fija en cosas muy raras) me ha dicho que este fin de semana se lo ha encontrado no sé dónde y que el Hetero Morboso estaba muy bueno: fibradito, guapete, marcando de todo (¿véis por qué digo que se fija en cosas muy raras?). Total, que me he tenido que rendir a la evidencia y volverlo a abducir en mi messenger. Pero, cómo no, Mr. T(ocho) ni se ha dado cuenta de que he reaparecido después de medio año.
¿Por qué los heteros son tan poco detallistas? Qué cruz.
A ver qué me invento para entrarle disimuladamente sin que se note que quiero que me la endiñe... ¡digo! Que quiero recuperar el tiempo y la amistad perdida. Qué mal pensados sois.
Mientras tanto voy a seguir bebiendo agua mientras voy a ver una peli o a jugar a la consola o a terminar ya el puñetero guión que hace un año que digo que "estoy terminando". Deseadme suerte. Y recordad: Nunca os fiéis de alguien que no sea gay.
Creo que voy a dejar de poner lo de los volúmenes porque me pierdo y los pongo mal. Diré que este es el 20 y si cuela cuela:
¡He vuelto!
¡Oleeeee! ¡Que suenen las trompetas! ¡Que caiga el confetti! ¡Que se desnuden los chulazos! ¡Hidroboy is Back!
Sé que he estado mucho tiempo sin escribiros, pero es que estaba pasando por un momento muy... doloroso. Algunas de vosotras, queridas amigas, ya sabéis que tenía una piedra en el riñón y como no salía pues estaba medio día retorciéndome de dolor y drogándome para que no me doliera (qué cuentista soy...).
Total, que me he tirado una semana bebiendo más agua que una vaca y meando cada cuarto de hora y hoy, por fin, creo que puedo decir que ya no tengo piedra. Se ha debido deshacer por que yo no he sacado ninguna piedra.
Y bueno, dejo de hablar de cosas que salen por la punta del pene que muchos de vosotros debéis estar retorciéndoos de dolor y otros... os estáis pasando la lengua por los labios ¡Indecentes!
Os cuento una cosa. Hace mucho tiempo hice un post sobre los Heteros Morbosos. Mi inspiración fue un chico al que conocí de rebote (era el típico conocido de un conocido) por el que nunca me interesé hasta que vi una foto suya y vi que estaba buenísimo (llámame tonta!). Así que empecé una maniobra de acoso y derribo hasta que me di cuenta de que no servía de nada por que el pobre era más tosco que un ladrillo y además empezaba a ponerme nervioso con su absurdo juego ambiguo de "que sí, que sí... pero mejor no". De él saqué grandes frases como "Yo soy genéticamente hetero... aunque en determinadas circunstancias me podría líar con un tío" o "Dije Johnny Depp, y tú no eres Johnny Depp" (Al más puro estilo Álex de la Iglesia: ¡Dije Johnny Depp!).
El caso es que un día me invitó a una fiesta en su casa a la que, realmente, no me apetecía ir. Y no me apetecía por que me veía qué iba a ser: un montón de tíos heteros sentados en el sofá bebiendo cerveza sobándose el paquete y diciendo cosas que sólo saldrían en una serie de José Luis Moreno. Y si había alguna tía, sería tonta.
Fue entonces cuando un amigo común me preguntó si iba a ir y le dije que si iba él sí que iría. Al rato me vino el Hetero Morboso a decirme que si iba a ir; yo me hice de rogar un poco (con lo que me gusta a mí) hasta que me di cuenta de que lo que quería era que yo fuera para que el amigo común este también fuera... él lo negó, pero el caso es que el amigo común ya me lo había dicho antes.
Total que como me aburría dejé de perder el tiempo con él y me fui a perderlo con otra cosa.
Hasta ayer.
Otro amigo común (que dice es hetero pero se fija en cosas muy raras) me ha dicho que este fin de semana se lo ha encontrado no sé dónde y que el Hetero Morboso estaba muy bueno: fibradito, guapete, marcando de todo (¿véis por qué digo que se fija en cosas muy raras?). Total, que me he tenido que rendir a la evidencia y volverlo a abducir en mi messenger. Pero, cómo no, Mr. T(ocho) ni se ha dado cuenta de que he reaparecido después de medio año.
¿Por qué los heteros son tan poco detallistas? Qué cruz.
A ver qué me invento para entrarle disimuladamente sin que se note que quiero que me la endiñe... ¡digo! Que quiero recuperar el tiempo y la amistad perdida. Qué mal pensados sois.
Mientras tanto voy a seguir bebiendo agua mientras voy a ver una peli o a jugar a la consola o a terminar ya el puñetero guión que hace un año que digo que "estoy terminando". Deseadme suerte. Y recordad: Nunca os fiéis de alguien que no sea gay.
Esta chorrada fue publicada
el martes, 2 de noviembre de 2004 at 16:31.
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