Y me obligo a escribir algo. Que más de una debe estar pensando: "¡Ya se ha muerto!" ¡¡PUES NO!!

Sigo viva y coleando (sobretodo... ¡viva!) y no hay quien me pare.

Tuve otro disgusto con el iPod. Lo enchufé antes de irme a trabajar para actualizar las canciones... y el Mac me dijo que nanai de la china. En el PC tampoco iba. ¡Me puse histérica! Así que cogí el invento y me volví a la tienda y le dije al chico:

"Mira tú: me arreglas esto de una puta vez o me das uno nuevo. Y mientras te decides, ponme un iPod Nano ¡que yo no voy sin música por la vida!"

Y me compré el Nano de un giga.

Y esa misma tarde el chico me arregló el iPod.

Así que tengo ¡dos hipos! Uno blanco y gordote y otro negro y pequeñito... ¡PERO MEGA FASHION! Tengo que comprarme ahora todo de accesorios fashions para el invento este. Pero queda de mueeette cuando metes la mano en el bolsillo y lo sacas así como el que se saca... lo que sea que te sacas del bolsillo y la gente te mira así como: "¡perra!" y tú te mueres del gusto porque te está mirando hasta el director del Show de Truman.

Claro que la putada fue meter canciones ahí. Porque acostumbrado como estoy al otro, que le meto todo lo que quiero y no se queja (es lo que tienen los 60 gigas) pues claro... Tuve que crear una lista de reproducción "Mini" con lo más Essential de lo Essential... Si total, luego pongo el shuffle y siempre suenan las mismas putas canciones!!!

Pero como ahora hay poquitas y son las más elegidas, pues las que suenan son las que más me gustan de todas.


En el trabajo... todo bien. Very bien. Muy contento, muy alegre y muy todo yo. Aún no he visto Volver, así que no sé si volveré a verla.

El otro día me puse en el iTunes una lista de reproducción que me creé de música petarda para cuando tengo uno de esos días del mes que me da por sacar pluma y caminar por la calle como si fuera el clon guapo de Paco Clavel y me fui a la ducha. No recuerdo qué sonaba. La Britney, o la Kylie o alguna de estas.
Pero en cuanto entro en el baño... ¡Horror! ¡¡Empieza a sonar el Cántame de María del Monte!!

A mí que me da un ataque de risa y abro la puerta para descubrir que aquello retumbaba un cojón y seguro que todos los vecinos se iban a acordar de mí y de la peregrina y de que tiene ganas de que le cantes. Así que, en pelota picada, me paseé por toda la casa partiéndome la caja hasta que llegué al ordenador y pude pasar la canción. Y cambiar la lista de reproducción: que por ahí pululaban Raffaela, Camilo, Paranoika y las Yuri, dispuestas a hundir mi reputación vecinal.

Hablando de reputación vecinal. Tengo viviendo arriba (donde antes vivieron los gitanos psicópatas que se tiraban el bote de jabón a la cabeza -lo que me recuerda que hoy he hecho un akelarre de botes de jabón vacíos y los he tirado todos-, donde después vivieron los kiwis ilegales más silenciosos jamás encontrados, donde después vivieron la pareja de cholos que escuchaban Estopa mientras yo comía bocadillos de nocilla...) a otro cholo. Con sus padres. Es rollo familia feliz y normal.

Bueno, todo lo normal que puede ser alguien en este barrio. Osea: NADA.

Sólo deciros que en verano al cholo le daba por cantar el Campanera a las tantas de la noche... ¿se estaría pajeando? ¿Y su polla se llama Campanera? ¿Por qué has pintao tus ojeraaaaas? ¿Era así? No sé, yo eso se lo dijo a Manolito Gafotas.

El caso es que el niño este, porque debe tener como 15 o 16 años, no sé, es el típico niño que... bueno, eso. Y yo me lo cruzo siempre en mis momentos más gays osea: cuando voy escuchando la lista de reproducción de súperputa (también conocida como Tricomona's Session).
Hoy, por ejemplo, iba yo toda monísima con mis bambas naranjas y mi camiseta naranja (¡conjuntada a lo butano fashion! ¡Viva la butano fashion!) y estaba él en la puerta con un amigo hablando. Yo, que soy así de puta, justo cuando he entrado en el campo de visión me he sacado el Nano del bolsillo así como os decía antes (¡Taraaaa!) y he notado cómo me miraban.
Mi vecino le decía algo al otro. Seguramente un: "Es maricón". Pero como yo llevaba a los Black Eyed Peas a toda hostia, pues no he escuchado nada.
Entonces me he colado entre los dos y he soltado un "HOLA!!!" que me parece que se han asustado y todo. He llegado a casa, he enchufado el Nano a los Harman Kardon (¡Toooma!) y entonces he puesto a sonar el Hung Up y no sé qué mariconadas más.
Todo con la esperanza de que picara a la puerta y dijera: "¡Hazme un hombre!"

Pero claro, es menor. Es ilegal. Y yo soy un tío legal, que sólo quiere que le quieran.

Y ya no sé qué más contaros... Ayyy los putos anuncios...

¿Ha entrado lo de los putos anuncios? ¿Ha entrado? ¡Estoy preguntándolo! ¡¿Ha entrao lo de los putos anuncios que he dicho?!

Ahora en el iTunes me suena el What Can I Do. Está bien porque me ha dado por dejar de escuchar música deprimente y ahora estoy como más animado. Pero todo son canciones de amor. Divertidas, pero de amor. Y claro, yo sólo me río. xDD

Y ya no sé qué más contaros...

Me acabo de tirar un eructo. Erupto. No lo sé. Pero ha sonado. Ha sido así como "groaaaaar".

Entre esto y María del Monte... ¡mis veciones estarán contentos!

Esta chorrada fue publicada el viernes, 24 de marzo de 2006 at 00:26. Puedes dejar un comentario. Pero no seas puta y fírmalo.