<body><script type="text/javascript"> function setAttributeOnload(object, attribute, val) { if(window.addEventListener) { window.addEventListener('load', function(){ object[attribute] = val; }, false); } else { window.attachEvent('onload', function(){ object[attribute] = val; }); } } </script> <div id="navbar-iframe-container"></div> <script type="text/javascript" src="https://apis.google.com/js/platform.js"></script> <script type="text/javascript"> gapi.load("gapi.iframes:gapi.iframes.style.bubble", function() { if (gapi.iframes && gapi.iframes.getContext) { gapi.iframes.getContext().openChild({ url: 'https://www.blogger.com/navbar.g?targetBlogID\x3d7433086\x26blogName\x3dHidroboy+Classic\x26publishMode\x3dPUBLISH_MODE_BLOGSPOT\x26navbarType\x3dBLACK\x26layoutType\x3dCLASSIC\x26searchRoot\x3dhttps://hidroboyclassic.blogspot.com/search\x26blogLocale\x3des_ES\x26v\x3d2\x26homepageUrl\x3dhttp://hidroboyclassic.blogspot.com/\x26vt\x3d731407589870964681', where: document.getElementById("navbar-iframe-container"), id: "navbar-iframe" }); } }); </script>

Pendejo por aquí, pendejo por allá

Hace unos días en el trabajo me pareció ver pasar así muy de refilón a mi ex-mejor amigo. El Killer (así lo llamaban en el instituto desde que un día, en clase de inglés, le dió por hacer una redacción sobre la mente de los asesinos en serie). Aún me acuerdo cuando subió a la tarima y empezó a leer:
"The Killers: WHAT IS IN THEIR MIND?"

Lo mismo que en la tuya, pensaron muchos, y ya se quedó con el mote.

El caso es que hoy ha sido un día de reencuentro con etapas pasadas. Mientras estaba en la cafetería descansando me ha venido a la cabeza la etapa en que quise ser un heavy como los amigos de mis hermanos y me dio por coger una guitarra y, con 3 acordes, hacer una canción que decía:
"Ven, tú, sí. Yo te dejo. Ven, tú, sí, oh ven hacia mí. Ven, tú, sí, aunque seas pendejo. Ven, tú sí, noséqué nosécuantos". Estas cosas a la gente normal les da vergüenza reconocerlas pero yo lo cuento para que veais lo creativo que soy.
Ni que decir tiene que mi etapa heavy no duró mucho. Lo de pendejo lo puse porque me rimaba con "dejo" y porque por esa época a mi hermano mayor le dio por escuchar Brujería (o algo así) y no paraban de decir pendejo por aquí, pendejo por allá.

Luego han quitado la película de Robots que llevaba una semana reproduciéndose en todas las teles de la tienda y han puesto Flaix TV. Que bueno, hay cosas mejores, pero después de aguantar la peliculita de marras 4 o 5 veces cada día... pues cualquier cambio es para mejor. Aunque ya dicen que más vale malo conocido que bueno por conocer, y es que después de unos cuantos videoclips de estos de grupos malos malos... ha venido el de la rana.

He intentado escribir la letra de la canción, pero soy incapaz. Esas onomatopeyas satánicas no pueden reproducirse en texto y, si alguien lo consigue, destará el holocausto final.
Total que toda la tienda ha levantado la cabeza (como cuando alguien habla por megafonía y se equivoca, que entonces además de levantar la cabeza nos reímos y le llamamos para reírnos de él), nos hemos mirado con cara de "¡NO!" y hemos mirado al que controla las teles exigiendo una solución. Y es una pena porque no es culpa suya que en la tele pongan eso... pero jomío, para ver a la rana loca esa ¡nos pones a la Campos!

Hablando de la Campos. Ahora que he estado unos días yendo de tardes he podido ver a la Campos y a la Quintana. Y tengo un problema porque me gustan las dos. Tendré que grabarme una y ver la otra.

Os decía antes que el otro día me pareció ver a mi ex-mejor amigo por un motivo. Y es que hoy no me ha parecido verlo, hoy me lo he encontrado de cara.
Dejo lo mejor para el final. Se ve que ahora el chico este vive cerca de donde trabajo y se pasa a menudo. El caso es que él estaba ahí esperando a un vendedor en el mostrador y yo le he visto de refilón y he pensado: "¡El Killer!" (no diré su nombre por si lo está leyendo, aunque vamos... si lo está leyendo y aún no sabe que es él.......... ¡pendejo!).
Total que estaba yo con un cliente y al terminar me acerco al mostrador así como el que no quiere la cosa y digo: "Hola Killer" (repito que no diré su nombre por si lo está leyendo él o su prima la de Cuenca y luego se lo xiva... ¡digo! Xavi... ¡¡Digo!! Chiva).
Él me mira y pone esa cara de sorpresa tan extraña que siempre puso (y que fue uno de los motivos por los que pasó a ser ex-mejor amigo: que me parecía más falso que un duro de 4 pesetas). Me reconoce, me explica que mientras su "pareja" está en el H&M mirando ropa él ha venido a preguntar una cosa sobre un juego y luego me pregunta qué tal, yo le digo que trabajando mucho (y es que trabajo mucho de verdad) y después de una conversación anodina sobre nuestros ex-amigos (de mí son todos ex, de él no sé si lo serán) va y me pregunta lo que nunca se debe preguntar (y menos si hace 4 años que no ves a alguien y vas a tener una conversación de 5 minutos):
"¿Qué tal los amores?"

Podéis comprobar que la pregunta en sí tiene miga ya. Porque no pregunta "¿estás saliendo con alguien?" sino "¿qué tal los amores?" como si mandaran al Quijote a comprar al Carrefour. Yo le miro, no me puedo creer que me pregunte esa indiscreción. Como no le iba a decir que iba más caliente que el palo de un churrero le he dicho que bien, que un poquito por allí y un poquito por allá. Y he aprovechado para colarle que el otro día salí de fiesta (pa que no se piense que soy un asocial, que lo soy) y que me emborraché con 2 cubatas y que qué desfase y que qué guay. Él me ha dicho que ahora se ha aficionado a los bares Hawaianos. Según él a parte de decoración no hay nada más, pero le gustan.
Cosas de él.
Luego hemos seguido la conversación con tonterías sobre nuestros trabajos y nos hemos despedido. Por un momento he sentido la tentación de darle mi teléfono móvil. Pero ¿pa qué? Si no quiero que me llame, pero era para quedar bien. Total que me veo que a partir de ahora volveré a verlo a menudo.

Tengo alguna cosa más que contaros, como por ejemplo las consecuencias de no pagar todo lo que he comprado (¡Es el cuarto aviso que le dejo, Sr. Hidroboy. Como no pague pasaré su expediente a un departamento superiooooor!). Pero ahora no me apetece, que me voy a arreglar para ir al cine.
Y mañana, a trabajar.
Y pasado, a trabajar.
Y al otro, a trabajar.
Y al otro, también.
Y así hasta el jueves.
Y luego lo mismo me fugo y me voy a las Bahamas a chupar bananas.
« Home | Next »
| Next »
| Next »
| Next »
| Next »
| Next »
| Next »
| Next »
| Next »
| Next »

» Publicar un comentario