<body><script type="text/javascript"> function setAttributeOnload(object, attribute, val) { if(window.addEventListener) { window.addEventListener('load', function(){ object[attribute] = val; }, false); } else { window.attachEvent('onload', function(){ object[attribute] = val; }); } } </script> <div id="navbar-iframe-container"></div> <script type="text/javascript" src="https://apis.google.com/js/platform.js"></script> <script type="text/javascript"> gapi.load("gapi.iframes:gapi.iframes.style.bubble", function() { if (gapi.iframes && gapi.iframes.getContext) { gapi.iframes.getContext().openChild({ url: 'https://www.blogger.com/navbar.g?targetBlogID\x3d7433086\x26blogName\x3dHidroboy+Classic\x26publishMode\x3dPUBLISH_MODE_BLOGSPOT\x26navbarType\x3dBLACK\x26layoutType\x3dCLASSIC\x26searchRoot\x3dhttps://hidroboyclassic.blogspot.com/search\x26blogLocale\x3des_ES\x26v\x3d2\x26homepageUrl\x3dhttp://hidroboyclassic.blogspot.com/\x26vt\x3d731407589870964681', where: document.getElementById("navbar-iframe-container"), id: "navbar-iframe" }); } }); </script>

Freaky Monday (Parte 3 y final)

Después de haberme pasado todo el fin de semana sin escribir nada (aquí, por que en otros sitios... me he quedado a gusto) voy a quitarme de encima ya lo del Freaky Monday que se está alargando demasiado. Tanto tanto... como una semana.

FREAKY MONDAY 3
"¡¡Eres mi héroeeeee!!"

Si no recuerdo mal dejamos la cosa cuando salimos del New York. Se me olvidó comentar un par de cosas.
La primera es que mis ojos no podían creer que un lunes 31 de enero hubiera tanta gente de fiesta. La segunda es... la foto.
No voy a reproducirla aquí, aunque sé que debería, por que no tengo permiso de todos los participantes en tan extraña orgía electrodoméstico-apocalíptica. De todas formas no creo que nuestro grupo fuera el único capaz de meter a alguien en una nevera abandonada y hacerle una foto mientras los demás le miramos con cara de: "These things... do happen".

Sigamos con la cosa.
Una vez fuera del New York aún teníamos ganas de más, así que el que acababa de salir de la nevera (que es como decir que salió del armario en Barcelona) nos propuso ir a un sitio cuyo nombre no despertaba mucha confianza: Chez Popof. ¿O era Chef Popoz? Ya me corregirá alguien.
El sitio este estaba metido en una calle de estas cerca de Plaça Sant Jaume. Una puerta de madera enorme, rollo Frau Brühen, cerrada a cal y canto. El neverófilo picó y al momento la puerta se abrió y apareció un hombre con pinganillo (pero sin chepa). El local en sí no era más que un bar típico de pueblo incrustado en plena Barcelona. Se ve que había un piso arriba con más gente donde debían poner música o yo qué sé qué. El caso es que no lo vimos por que al ver la desolación y el vacío que había en el primer trozo decidimos que la visita a Chez Popof había resultado curiosa pero improductiva, así que nos fuimos. Pero salir del Popof no es algo fácil. El hombre del pinganillo nos tuvo esperando en la puerta un rato mientras hablaba con alguien en el exterior que le decía si pasaba alguien o no por la calle para que nos pudiera dejar salir sin que nadie se diera cuenta de que el local estaba abierto. Me sentí un poco inmigrante ilegal.
Y esa espera debió apagar el espíritu festivo de la noche y encender la vejiga de la Brondo que quería irse a casa cuanto antes por que se estaba meando. Después de organizar cómo se iba a volver cada uno ("A mí me caben cinco" - "Si le lubricas bien le caben 6" - "Tú quieres ir al Panam's ¿eh?") fuimos al coche de P.
El coche de P... Algún día haré un post a parte sobre el coche de P... y volvimos a casa. Como enchufé el discman para que pudieran escuchar el "Hay un hombre en España que lo hace todo" de Astrud, dejamos sonando Hedwig and the Angry Inch mientras todos cantábamos como locos y saludábamos a la gente que nos miraba atónitos desde sus coches. Siempre me ha gustado hacer el loco desde el coche... Como aquella noche que subimos al Tibidabo escuchando Poe de Dagoll Dagom (que era lo más de miedo que teníamos) y dimos la vuelta pitando al ver aparecer la Torre de Collserola entre la niebla justo cuando la música hacía "NINONIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIII".
El caso es que mientras cantábamos el "Tear me down" la Brondo se quedó atónita al ver que me sé de memoria el interludio de Yitzhak:
"On august twelve 1961 a wall was erected down the middle of the city of Berlin. The world was divided by a cold war and the Berlin wall was the most hated symbol of that divide. Reviled, graffitied, spit upon... We thought the wall would stand forever... And now that it's gone we don't know who we are anymore. Ladies and gentlemen! Hedwig is like that wall! Standing before you in a divide between east and west, man and woman, top and bottom... And you can try to tear her down. But before you do, you must remember ONE THING!!!!!"
Al terminar la Brondo empezó a gritar:
"¡Aaaaaaaah! ¡Te lo sabeeeeees! ¡Eres mi héroeeeeeeeeeeee!¡ERES MI HÉROEEEEEEEE!" A mí, por supuesto, en ese momento el ego me llegaba hasta el infinito y más allá (digue'm tonto...), pero he de reconocer que resultaba extraño que una actriz se extrañara de que me hubiera aprendido un texto y lo pudiera recitar... Tal vez ella utiliza otro método...
Y bueno, nos despedimos entre abrazos y llantos de la emoción acumulada durante la noche, nos dimos los teléfonos, nos dimos más besos y más abrazos, las lágrimas inundaban nuestros corazones y nos separamos, tristes y cabizbajos. Por que sabíamos que rara vez se repetiría una noche de lunes tan rara como aquella.
Y es que tal vez no os lo haya parecido, por que creo que fue algo inexplicable; pero sí es cierto que todos los que estuvimos aquella noche allí notábamos que aquello... normal... lo que se dice normal... no había sido.

« Home | Next »
| Next »
| Next »
| Next »
| Next »
| Next »
| Next »
| Next »
| Next »
| Next »

» Publicar un comentario